La Paz, Baja California Sur (BCS). De acuerdo con datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Baja California Sur cuenta con la menor disponibilidad de agua dulce por habitante, la cual llega a los 785 metros cúbicos por año, mientras que el promedio nacional es de 4,200.
En relación con lo anterior, se indicó que la escasez del vital líquido es consecuencia de las condiciones climáticas y geográficas de la entidad, pero también está relacionado con el aumento de la población, la falta de infraestructura y fallas en el sistema de distribución.
Con una precipitación media anual de 200 litros por metro cuadrado, Baja California Sur es conocido como el estado más árido del país; de esa cantidad, solo 5.7 litros por metro cuadrado llegan a los acuíferos, el resto se evapora o escurre hacia el mar.
Por otro lado, la desalinización, el reúso de aguas residuales tratadas y la acumulación en presas aportan el 20 % del suministro de agua, según el Plan estatal de acción climática, de enero del 2012.
El estudio advierte que la sobreexplotación ha mermado el nivel de acuíferos y favoreciendo la intrusión de aguas marinas en numerosas cuencas hidrogeológicas.
Asimismo, advierte que la extracción de agua subterránea en Baja California Sur es mayor que la disponibilidad de acuíferos, lo que puede constituir una restricción para su desarrollo y comenzar a generar riesgos para el abasto de la población.
Finalmente, el análisis prevé que la región enfrentará una crisis de disponibilidad de agua para el año 2025; de igual manera, destacó que en la década del 2000-2010, la población de BCS aumentó un 50 %, propiciando la disminución de abasto a 785 metros cúbicos anuales.
Con información de NBCS Noticias