Conafor inicia la siembra de 800,000 árboles en Baja California Sur

500,000 de estas plantas fueron cultivadas en el vivero militar de La Paz, 250,000 en el Valle de Santo Domingo y el resto en Los Cabos
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La Paz, Baja California Sur (BCS). A partir de este mes de agosto la Comisión Nacional Forestal (Conafor) inicia en BCS la reforestación de 500 hectáreas con más de 800,000 plantas de mezquite dulce y amargo, palo fierro, palo de arco, neem y palma washingtonia, principalmente en Los Cabos, La Paz y Comondú.

Francisco Javier García Guerrero, gerente estatal de la Conafor, detalla que 500,000 de estas plantas fueron cultivadas en el vivero militar de La Paz, 250,000 en el Valle de Santo Domingo y el resto en Los Cabos, usando los viveros de la dependencia.

Asimismo, señaló que se plantarán mínimo 20 hectáreas por ejido y que en 300,00 metros cuadrados ofrecerán mantenimiento a las áreas forestadas en años anteriores, cumpliendo así su meta para 2015.

Por otro lado, adelantó sobre el proyecto de siembra para la colonia Villas del Encanto, llamado “Un nuevo bosque”, donde el 23 de agosto a partir de las nueve de la mañana plantarán más de 200 árboles.

“Se piensa dejar el proyecto para que el día de mañana se hagan caminamientos, se hagan senderos, áreas de descanso, y no es plantar toda la superficie que tiene el parque, sino estratégicamente para que se siga el proyecto y sea un lugar de esparcimiento para toda la gente del fraccionamiento”.

García Guerrero recordó que la superficie forestal del estado es del 80 por ciento, tomando en consideración que el territorio ocupa un total de siete millones 400,000 hectáreas y que más del 99 por ciento es semidesierto, contando con “menos del uno por ciento” de bosque, ubicado en la reserva de la biósfera Sierra de la Laguna, al igual que 70,000 hectáreas de manglar.

“Como la mayoría es semidesierto y hay una muy buena conservación, no tenemos deforestación por la intervención de la mano del hombre, tenemos afectación por cuestión de incendios, pero fundamentalmente es áreas forestales que se recuperan en un tiempo […] Afortunadamente la palma washingtonia o la palma abanico, convive o depende del fuego y, a través del tiempo, en dos tres años se vuelven a recuperar”.


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