La Paz, Baja California Sur (BCS).- El Ayuntamiento de La Paz puede detener la aprobación del proyecto minero Los Cardones, deja ver Víctor Daniel Hernández Valdez, director de Ecología, Educación y Gestión Ambiental del municipio, precisando que hasta el momento su oficina no ha recibido el resolutivo de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y que una vez ocurra emitirá su opinión con la única intención de “velar por la salud de los ecosistemas, por la salud de la población, por la salud ambiental”.
“En ocasiones anteriores han sido precisamente los ordenamientos municipales los que han frenado el desarrollo de otras instalaciones mineras, y seguramente será lo mismo”, dijo Hernández Valdez al hablar del proyecto Los Cardones y su aprobación, recordando que los ordenamientos del Ayuntamiento de La Paz velan por los recursos naturales y su conservación.
“La posición de la presidenta ha sido muy clara, muy clara, definida y definitiva, en el sentido de que no vamos a promover nada que perjudique la salud ambiental”, señaló el director, recordando que uno de los mayores peligros que ofrece minería Los Cardones es la alta exposición al arsénico, un elemento que existe en equilibrio en la naturaleza, dijo, pero que al exponerlo de manera biodisponible es sumamente peligroso.
En este sentido, expuso que si La Paz se encamina a dedicarse al turismo como actividad económica primordial, la industria minera sería un obstáculo.
“La vocación de la región es una vocación turística, es una vocación de otras actividades, muy conservadoras del ambiente. La minería a cielo abierto, a gran magnitud, es un riesgo muy alto para las actividades vinculadas al turismo, al desarrollo turístico”.
Por otro lado, Tito Guillermo Fenech Cardoza, director general de Desarrollo Urbano y Ecología de La Paz, ha dejado ver que Vista Gold y Compañía Minera Zapalaname S.A. de C.V., promoventes de Los Cardones, han realizado diversas adecuaciones al proyecto inicial buscando su aprobación, más no buscando favorecer la ecología, sino únicamente en busca de cumplir con las normas oficiales mexicanas.
“Lo han cambiado varias veces, cada vez lo blindan más. Creo que va en la cuarta revisión, y cada vez lo afinan más […] Es una afinación por términos legales y para que pase las normas”.
