En Punta Lobos, investigadores estudian sobreexplotación de tiburones

El tiburón maustelus es uno de los que se encuentran en aguas de Baja California Sur; el Cicimar realiza un trabajo, en conjunto con pescadores, para estudiar la biología de estas especies y recomendar medidas de manejo sustentable
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La Paz, Baja California Sur (BCS). En el campo pesquero Punta Lobos —en Todos Santos, al Sur del municipio de La Paz—, especialistas del Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas (Cicimar), trabajan con pescadores locales para obtener la información de los tiburones; debido a que estas especies son extremadamente sensibles a la sobreexplotación y a nivel mundial se ha observado una disminución generalizada de las capturas, el investigador Felipe Galván Magaña participa en este proyecto con el fin de recomendar medidas de manejo pesquero o de conservación del tiburón en México.

En vísperas de la celebración del Día Mundial de los Océanos —el próximo 8 de junio—, el investigador del Cicimar señaló que en el planeta hay 400 especies de tiburones, de las cuales 80 se encuentran en el Golfo de México, el Pacífico y El Caribe. En el Golfo de California están el tiburón azul y martillo, 2 de las 5 especies que más se capturan por su importancia desde el punto de vista pesquero, aunque también hay especies que pueden pertenecer a subpoblaciones diferentes a las encontradas en la costa occidental de Baja California Sur, como los denominados Mustelus (Mustelus lunulatus, Mustelus henlei), el tiburón angelito (Squatina californica) y las rayas guitarra (Zapterix exasperata y Rhinobatos productus).

Galván Magaña mencionó —en entrevista para El Sol de México— que en el Golfo de California los prestadores de servicios alertaron de la disminución de las capturas hace 2 décadas, por lo que con la colaboración de investigadores y estudiantes de México y diferentes partes del mundo, indagan las causas; en estos trabajos desarrollados en la playa Punta Lobos diseccionan los tejidos de músculos, estómago e hígado para analizar el contenido estomacal y los contaminantes en el Laboratorio de Biodiversidad y Dinámica de Ecosistemas Marinos. El investigador reinició en el año 2000 los estudios de la edad, crecimiento, reproducción, hábitos alimenticios y toxicología de los tiburones y rayas en México y Ecuador, para aconsejar medidas regulatorias en su pesca.

Estimó que la disminución de tiburones se atribuye al impacto de la captura más que a fenómenos naturales y se congratuló de que la regulación pesquera ha permitido que en los últimos 5 años se observen diferentes especies de tiburones en el Sur del Mar de Cortés, lo que podría ser un indicador de un posible aumento de las poblaciones; por último, luego de 30 años de experiencia en tiburones y rayas, señaló que el trabajo entre investigadores, pescadores y gobiernos tiene que ser conjunto para preservar los recursos pesqueros y continuar explotándolos de manera sustentable.


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