La Paz, Baja California Sur (BCS).- La familia de Marlene Vinalay Abarca debería estar feliz porque su hija no tiene cáncer, afirmó el oncoginecólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Ricardo Alberto Ybarra Yee, luego de que según sus padres a la paciente se le extirparan ovarios y matriz sin realizarse una biopsia sino hasta después de la intervención quirúrgica, durante cuya recuperación sufriría una hipoxia cerebral que la mantiene en coma.
“Nosotros estamos muy tranquilos porque como médicos hicimos todo lo que estaba en nuestras manos, hicimos nuestra labor, hicimos todo basado en la ciencia, que es un diagnóstico, que es un tratamiento y que afortunadamente la paciente tiene complicaciones propias de su enfermedad, que no tienen absolutamente nada que ver con el diagnóstico de cuando nosotros la operamos.
«Afortunadamente nosotros la operamos por un problema sospechoso de cáncer, no fue cáncer gracias a Dios, y yo creo que a una persona que le digan que no fue cáncer al final debe de estar feliz, no debe de estar triste, no debe de estar enojado”, manifestó.
Julio César López Torres y María Concepción Abarca, padres de Marlene, aseguran que la hipoxia, que la dejó prácticamente en estado vegetativo le fue causada a su hija durante un traslado dentro del mismo nosocomio, luego de que personal de intendencia del IMSS que funge como camillero transportara a la paciente de Terapia Intensiva a Hospital sin oxígeno, de lo que fue testigo su esposo, el señor Héctor Francisco González Ortiz, causándole un severo daño cerebral.
Aunque el señor González Ortiz asegura que a su esposa las trasladaron únicamente un par de camilleros, Ybarra Yee señala que los pacientes “siempre van acompañados, por lo menos, de un enfermero terapista o por el personal médico”, dejando ver que el dolor en ocasiones lleva a la gente a percibir cosas que no son reales.
“Ningún camillero, o en este caso un compañero de intendencia, haría un acto como cerrar un tanque de oxígeno, el oxígeno siempre lo prueban, es algo tan sistematizado que realmente es poco probable que suceda […] El familiar del paciente refiere que hubo un detalle en el traslado, pero desafortunadamente nadie de nosotros estuvimos ahí”.
El trato que la prensa y la sociedad le ha dado el caso es “amarillismo”, opinó el ginecólogo del IMSS, como en su momento también lo expresara su delegado, Francisco Javier Bermúdez Almada, argumentando que detrás de esto existe ánimo de lucro sostenido en la pérdida de los valores.
“Desafortunadamente muchas veces el amarillismo y la gente han empezado a lucrar con el mismo dolor de los pacientes, y es triste que a veces los pacientes lucran con su propios familiares […] Hay que decirle a la sociedad que antes de hacer un juicio tome en cuenta todos las factores que hay alrededor, tanto de la enfermedad, como del propio paciente y del médico, que al final es un ser humano […] Quitarle una cédula profesional o quererlo enjuiciar, meterlo a la cárcel o pedir sumas estratosféricas de dinero por una demanda, creo que esas sí son cuestiones dolosas y hablan de los pocos valores que nos quedan hoy en día […] Los médicos jamás dañaremos a alguien con intención de dolo”.
El caso de Marlene Abarca es atendido por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), que según la familia se mantiene estrecha comunicación y ha logrado “destrabar” diversos “trámites” estancados en las oficinas del IMSS.
Que poca etica de Ybarra, decir que una familia debe estar feliz, por que te digan que tu familiar no tiene cancer, se lo aplaudiriamos si antes de extirparle los ovarios y matrriz, nos hubieran dado ese diagnostico, pero primero extirpan y luego sale con esa babosada, te voy a mandara hacer un monumento por $&@-%(%!, y si nadie estuvo durante el traslado de la paciente, como sabes que se cumplio el protocolo? Calladito te defenderias mejor, y el delgado como se atreve a decir que es amarillismo, cuando jamas nos ha dado la cara, ni enterado esta del caso,… Lee más »