La Paz, Baja California Sur (BCS). Luego de 65 años viviendo en Madero 2230 y dar a luz 10 hijos e hijas que crecieron en ese mismo hogar, la señora Gloria Camacho Astorga, de 85 años de edad, vive con la amenaza de ser desalojada por una de sus sobrinas, Rosario Martínez Castro, hija de uno de los hermanos de su fallecido esposo, a quien la familia acusa de proclamarse ilegítimamente heredera única de los 1,200 metros cuadrados intestados donde se ubica esa y otra casa.
En 2001, explica uno de los hijos de la señora Gloria Camacho, Juan Moisés Martínez Camacho, su prima Rosario Martínez Castro inició “de manera oscura” una serie de trámites para hacerse del terreno, que tiene un costo aproximado de 2 millones de pesos. El predio perteneció a Guadalupe Torres Nuño, explica, quien murió intestada en 1977 y era madre de su padre, Leopoldo Martínez Torres, el cual al fallecer dejó en posesión del terreno a su esposa, la madre de Juan Moisés, Gloria Camacho. Guadalupe Torres tuvo siete hijos y el último en sucumbir fue Raúl Martínez Torres, padre de Rosario. Según comenta la familia Martínez Camacho, ésta se valió de argucias para que su padre la declarara heredera única del lugar, violentando los derechos del resto de los descendientes.
“Hizo todo el papeleo para que mi tío, el señor Raúl Torres (sic), la declarara heredera universal mediante un juicio que en realidad tiene muchas inconsistencias, que cualquiera se da cuenta que hay corrupción, hay tráfico de influencias, hay dinero de por medio, y que de esa manera logró que jueces y gente que está metida en este medio se prestaran para llevar a cabo todo ese trámite, pero eso en realidad es una injusticia”.
El pasado viernes 19 de junio, dos actuarias, policías municipales y un grupo de personas que no se identificaron, acudieron al domicilio de la señora Gloria Camacho Astorga para hacer efectiva una ejecución de desalojo, solicitando que en 5 minutos la octogenaria estuviera en la calle acompañada de sus pertenencias, pues de lo contrario sería echada de su propia casa a la fuerza. El desalojo no se cumplió debido a que “había inconsistencias muy obvias en el papeleo” que les fue mostrado como evidencia para echarlos, asegura el señor Juan Moisés Martínez, sin embargo el peligro permanece latente.
Entre las inconsistencias que menciona se encuentra la presunta falta de coincidencia en las firmas de su tío, Raúl Martínez, que comprueban la herencia a Rosario; desdichos en las declaraciones de ésta durante el juicio, como aceptar que su tía ha vivido en Madero 2230 por más de 50 años y después, en el mismo expediente, acusarla de invadir el predio durante el año 2008; así como irregularidades en el levantamiento de las medidas del polígono en disputa.
La familia Martínez Camacho ha tratado de resolver el caso a través de varios abogados, pero aparentemente, menciona, todos terminan por ser “comprados”. A causa de la impotencia, decidieron acudir con el magistrado Ignacio Bello Sosa, quien trataría el caso, sin embargo la respuesta que obtuvieron de él, afirman, fue: “¿Usted cree que yo voy a leer todo eso?, yo nomás, así como me lo traen, yo los firmo, y el que sigue”.
“Lo que estamos tratando es obtener una ayuda, una asesoría honesta”, explica el señor Juan Moisés Martínez Camacho al hablar de su acercamiento a BCS Noticias, “que la gente conozca de esta injusticia, de esta infamia que se está cometiendo. Solicitamos ayuda, no estamos pidiendo que nos resuelvan el caso, lo que estamos pidiendo nosotros es una revisión, porque todo el proceso está amañado. Mi mamá toda la vida tiene viviendo aquí, nuestros padres procrearon diez hijos, mi hermano mayor tiene sesenta y tres años, el menor tiene cuarenta, todos nacimos aquí, todos salimos de esta casa, es una evidencia clara de que mi mamá ha estado habitando este lugar desde hace sesenta años, entonces cómo es posible que venga una señora que jamás se preocupó en vida de mi abuela y haya venido a quererse posicionar del terreno; por fuentes nosotros sabemos que este terreno ya lo tiene negociado”.
El actuar de los policías municipales durante el intento de desalojo fue considerado demasiado agresivo por la familia Martínez Camacho, tan es así que este lunes 29 de junio acudirán a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) a interponer una queja en contra de la corporación a la que pertenecen, debido al presumible trato inadecuado prestado a la señora Gloria Camacho Astorga.
