Antes no enmudecí como momia, no fui un perro mudo: Obispo sobre críticas de Gobernador de BCS

El Gobernador lamentó que algunos se quedaran callados durante la oleada de violencia en años anteriores, tras las críticas de la Iglesia; ante esto, el Obispo respondió, asegurando que también en ese momento alzó la voz
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La Paz, Baja California Sur (BCS). Al emitir su sermón dominical, el Obispo de La Paz, Miguel Ángel Alba Díaz respondió a algunos señalamientos que ha hecho el gobernador Víctor Castro Cosío sobre el silencio que hubo en años previos, cuando la violencia en la entidad era más palpable; no enmudecí como momia, eran otros tiempos, precisó recordando un par de cartas emitidas sobre ello.  

“Ahorita el crimen organizado no es tan violento, como en aquellas épocas en que, por lo menos, a parte de las veces que hablé —palabras que se lleva el viento—, escribí 2 cartas, que se hicieron virales a nivel nacional y fueron publicadas en la prensa. No enmudecí como momia, no fui un perro mudo, eran otros tiempos, era otro gobierno”, declaró hacia los feligreses.  

En ese sentido, el representante de la Iglesia Católica en Baja California Sur que el destino del profeta es advertir a su pueblo y, en este caso, a veces debe narrar lo que ha visto y oído, a fin de decirle a la sociedad: “abran los ojos”.  

“A veces tiene uno que contar, lo que ha visto y oído, y decirle al pueblo ‘abran los ojos’, siempre con el temor de que utilicen nuestras palabras, de que quieran amarrar navajas: ‘El Obispo dijo…”, “el Gobernador contestó…”, no sé si contestó, ni sé qué contestaría”, continúo.  

Por su parte, Alba Díaz explicó que no vino para “amarrar navajas”, sino para hacer una advertencia sobre la situación de inseguridad que se vive en Baja California Sur: “No vine para amarrar navajas, vine para hacer una advertencia […] ahora también tengo la obligación de decir: ‘estoy viendo…’, ‘la gente mira…’ ‘la gente tiene miedo’, hay que cuidar…Y no estoy hablando contra éste o contra aquel, esté quien esté”, dijo. 

Entre tanto, el Obispo de La Paz destacó que se debe interpretar la señales sin hipocresía, ya que él no busca votos, ni un gobierno, así como honores o aplausos, sino que sus mensajes se han dado para cuidar del pueblo. Nunca jamás, perros mudos, sentenció.  

“Hay nubes, va a llover, es posible que venga el huracán […] no buscamos votos, no buscamos este o aquel gobierno, no buscamos honores, no buscamos aplausos, no buscamos alabanzas, amamos a nuestro pueblo y debemos cuidar de nuestro pueblo. Nunca jamás, perros mudos”, concluyó.  


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