La Paz, Baja California Sur (BCS). El Comité Ejecutivo Seccional Democrático (CESD), escindido del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), denunció la entrega irregular de al menos 63 plazas laborales, las cuales, aseguran los docentes de la organización, sirvieron para privilegiar a familiares de funcionarios de gobierno y a aquellos que participaron en la campaña electoral de Carlos Mendoza Davis.
Luis Enrique Ojeda Meza, vocero del CESD, mostró talones de cheques de los nuevos empleados basificados de la Secretaría de Educación Pública (SEP), donde destacó un hijo del exlíder sindical Mateo Casillas Ibarra, un hijo de quien “administra los recursos humanos de la Secretaría de Educación Pública”, Rosalina Famanía; y un familiar de la diputada Diana Von Borstel Luna.
“Nosotros creemos que tienen todo el derecho a trabajar y demás, pero hay compromisos firmados y hay compromisos de cumplir un listado de prelación”, apunta Ojeda Meza, mostrando que actualmente 1,270 trabajadores administrativos no cuentan con plaza y que según la lista de prelación de la dependencia el último trabajador que podría obtener una debiera tener antigüedad desde 2006, aunque los más antiguos de los 63 iniciaron labores en 2010.
Los “compromisos firmados” de los que habla el vocero surgieron tras las manifestaciones y huelgas de mediados de año, sin embargo “el secretario de Educación Pública, en contubernio con el SNTE y otras autoridades de la propia Secretaría, le otorgan las plazas a quien les venga en gana”.
“Es una evidencia de cómo la centralización de la nómina es un parapeto que han utilizado para hablar de un avance de la famosa reforma y no hay tal cosa […], no se ha cumplido absolutamente nada […], es una hipocresía de documento”.
no es «nepotismo» es NEPOTISMO, pues.