La Paz, Baja California Sur (BCS). La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) informó que, durante el 2022, el costo de construir una casa en el país se incrementó en un 10.1 %. De acuerdo con la institución, esto se debe al incremento en el precio de los materiales. La cámara también apuntó que este porcentaje es superior a la inflación de la industria, que fue del 8.6%.
De acuerdo con el reporte «Principales variaciones en el precio de los insumos y su impacto en las obras», emitido por el Centro Nacional de Ingeniería de Costos (Ceico), los mayores incrementos se observan en los impermeabilizantes, el cemento, la pintura y el pegazulejo, con 22, 18.1, 15.3 y 12.7 %, respectivamente; esto según datos del Inegi.
Si consideramos impuestos y mano de obra, los insumos más caros son la cal, con un aumento del 22.4%; las pinturas, con un aumento del 20.5%; los impermeabilizantes, con un incremento del 18.7%, y el cemento, con un 18.4% de aumento.
El reporte también señala que, además de los materiales de construcción, existen otros aspectos que influyen en la variación del costo de las obras, tales como las modificaciones en el plazo de ejecución y los cambios de especificaciones.
Construcción de naves industriales tuvo un incremento menor
A diferencia de la construcción residencial, la edificación de naves y plantas industriales tuvo un incremento de tan solo 6.5%, quedando por debajo de la inflación de la industria. Esto se debe a una mayor demanda, la cual hace que se construyan más edificios de este tipo.
Por otro lado, las construcciones de inmuebles comerciales y de servicios elevaron su costo 8.3 por ciento y la construcción de carreteras, puentes y similares, solo 2 por ciento.
Al respecto, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción refirió que es importante que las constructoras, las dependencias de gobierno y las privadas elaboren su estudio de ajuste de costos de obras en ejecución o planeadas, a fin de que se reconozca la variación en el precio de los materiales y se garanticen mejores condiciones en la ejecución de trabajos. «de no ser así, las empresas constructoras e inversionistas perderán parte de su utilidad al tener un gasto mayor para compensar el incremento en el costo de la obra”, puntualizó.
