La Paz, Baja California Sur (BCS). El titular de la Cámara Nacional de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Luis Alonso Aguilar comentó que, en caso de que la entidad retroceda al nivel rojo en el Semáforo Epidemiológico de la Salud, pedirán a las autoridades no cerrar operaciones en restaurantes y que, en su lugar, los establecimientos puedan trabajar con el aforo mínimo, puesto que la pandemia ha obligado a 40 negocios de comida a cerrar definitivamente sus puertas.
“Tenemos alrededor de un 15 % de los que tenemos datos. Estamos hablando de más de 40 restaurantes, que tenían trabajadores, que ya tenían tiempo. La verdad, fue un duro golpe. No queremos irnos a un Semáforo rojo. Si se llegase a dar, nosotros ya hablamos con las autoridades, de que nos permitan trabajar al 30 % de aforo; a disminuir el número de comensales al máximo. O hacer doble los protocolos, pero que no nos cierren las puertas”, enfatizó.
En este sentido, indicó que el sector no ha podido recuperarse al 100 % de las pérdidas que tuvieron en el 2020 y que un retroceso más en el Semáforo sería catastrófico para la industria, pues podrían perderse nuevos negocios:
“Hay muchos restaurantes, muchos negocios de comida que están en la cuerda floja. La operación no se ha venido a recuperar, la verdad. Las ventas que teníamos antes no se han podido lograr, ni siquiera al 60 %”, expresó.
El titular recordó que son pieza fundamental en la cadena productiva, ya que generan la mayor cantidad de empleos en el municipio, motivo por el cual nuevamente se encuentran en la incertidumbre de volver a perder los pocos ingresos recuperados, tras el cierre total que se suscitó a inicios del 2020, cuando llegó el COVID-19.
«Nosotros somos un eslabón muy importante dentro de la cadena productiva […] Es una afectación muy grande la que se puede dar en nosotros. Ahorita estamos nada más en la incertidumbre, de qué es lo que va a pasar. Tenemos refrigeradores nuevos, si nos llegan a cerrar las puertas, va a ser una crisis tremenda de la que muchos no se van a levantar”, informó.
Finalmente, dijo que otro factor con impacto en sus ganancias es el comercio informal, pues hay ciudadanos que ofertan alimentos a través de redes sociales y eso reduce la clientela; además de que los cibernautas no tienen que pagar los impuestos, como sí lo hacen los restauranteros.
