La Paz, Baja California Sur (BCS). La familia Padilla Jiménez, de Los Cabos, ha interpuesto una denuncia penal por el delito de despojo en contra del titular de la Administración Portuaria Integral (API) de aquel municipio, Héctor Montaño Cota, la cual se averigua bajo el expediente 135/PAT/2015.
María del Carmen Padilla Jiménez explica que su padres cuentan con un puesto de comida en el lote 5 del estacionamiento de la API en Los Cabos, donde han sido expulsados a pesar de contar con un contrato de pensión desde 2009, y hace 18 días que no se les permite vender ningún alimento.
María del Carmen es hija de Román Padilla Ramírez, secretario de la Unión de Vendedores Ambulantes 16 de Septiembre y propietario de uno de los dos puestos que restan en el lote cinco, luego de que 6 fueran echados.
El señor Padilla permanece desde hace casi 20 días encerrado en el lugar, pues Héctor Montaño construyó un cerco alrededor del lote 5, el cual mandó soldar para que no hubiese manera de ingresar o salir, dejando al vendedor de comida en el interior, ya que éste decidió quedarse a defender su espacio, en el cual ha trabajado por 30 años, y hoy “come, duerme y se baña y hace sus necesidad fisiológicas como Dios le da a entender”, según señaló la hija.
Los 6 vendedores que accedieron a retirarse se encuentran aliados “con el exlíder croquista Fernando Díaz”, asegura también María del Carmen Padilla, quien viajó a La Paz para encontrarse con medios de comunicación y dar a conocer la historia, señalando que sus 6 excompañeros fueron “recluidos en el lote 7, al lado de dos contenedores de basura de los barcos”.
“Tenemos una demanda por el delito de despojo […], está en ratificación todavía, todavía falta que lo manden a declarar para que nos dé información”, precisa, lamentando que no fue posible llegar a acuerdos con el gerente de API Los Cabos, pues “se encierra en su oficina y no te quiere recibir”, por lo que además de demandarlo, solicitan su renuncia.
“Siempre he sentido que no tiene la capacidad de negociación, no tiene esa facilidad de lidiar con los problemas, se encasilla en una sola cosa y si le desagradas en cierto momento ya no te va a atender jamás”.
Además, con el mismo fin de mantener la zona cerrada, Héctor Montaño ha prohibido que vehículos se estacionen en el lugar, lo que afecta no sólo a los vendedores de comida, sino al mercado de artesanías que se encuentra en el sitio y a algunos prestadores de servicios turísticos.
Méndigo «PINACATE» MUERTO DE HAMBRE Y LAME-HUEVOS COMO SIEMPRE haciendo de las suyas como es su costumbre..