La Paz, Baja California Sur (BCS). Este jueves inició la temporada de captura de tiburón, mismo que se dio sin contratiempos en El Sargento, Los Planes, Los Frailes y la Zona Pacífico Norte; sin embargo, el ambiente en las costas de Mulegé, San Carlos y Puerto López Mateos refleja inconformidad, desorden y una falta de vigilancia, acusan.
Al respecto, el director de Pesca, Acuacultura, y Desarrollo Agropecuario en Mulegé, Jesús Salvador Verdugo Ojeda denunció que en Santa Rosalía solo 3 permisionarios lograron obtener o renovar los permisos de captura, mientras que otros 70 se quedaron en espera de que se resolviera su solicitud.
De igual forma alertó que han llegado al menos 12 pangas procedentes de Sonora y Sinaloa que vienen a trabajar esta pesquería; todos con permisos emitidos por la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), mientras que a los locales se les niegan, apuntó en entrevista para El Sudcaliforniano.
Los barcos utilizan líneas de más de una milla y entran en aguas donde la norma no se los permite, sacando grandes cantidades de producto, mientras que los pescadores ribereños usan artes de pesca artesanales y salen en pequeñas pangas, continúo explicando el funcionario.
Ante la situación, Verdugo Ojeda demandó a Conapesca que al emitir los permisos se tomen en cuenta a la autoridad municipal, pues en los hechos se está presentando una discriminación para locales.
En Puerto López Mateos, una de las zonas tiburoneras más importantes de la entidad, la situación también es crítica, más de la mitad de las lanchas que salieron al mar en el primer día, no cuentan con permiso, pero arriba el producto a la playa y lo regularizan adquiriendo una factura con algún permisionario.
El líder pesquero de Puerto López Mateos, Luis Camacho, denunció para El Sudcaliforniano que se trata de un problema añejo, sin embargo, en esta temporada se agrava más por la falta de vigilancia; en este puerto el número de permisionados no llega a 40, y son más de 100 las lanchas que andan en el tiburón, comentó.
Finalmente, se estima que el precio de este producto podría iniciar por arriba de los 23 pesos el troncho y en más de 400 pesos el kilo de aleta seca; no obstante, los precios oscilarán de acuerdo al tipo de tiburón.
Con información de Elías Medina/ El Sudcaliforniano