La Paz, Baja California Sur (BCS). La Cámara de Diputados aprobó la iniciativa propuesta por el gobierno mexicano que busca reformar la ley de Vertimientos en las Zonas Marinas Mexicanas con 257 votos a favor, 38 en contra y 47 abstenciones; este nuevo cambio, permite la posibilidad de que mineras submarinas provoquen un severo daño a ecosistemas marinos como el Golfo de Ulloa, en Baja California Sur; aún así, los diputados federales sudcalifornianos del Partido Acción Nacional (PAN) votaron a favor de la contaminación en los océanos de su entidad.
Los diputados federales del Partido Acción Nacional (PAN), por Baja California Sur, Jisela Paes Martínez y Ernesto Ibarra Montoya, votaron a favor de esta reforma que, según la página México Ambiental, permitirá el depósito en el mar de desechos de operaciones mineras marinas ya autorizadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Cabe recordar que apenas hace 3 años, en 2014, la minera Don Diego intentó iniciar operaciones en el Golfo de Ulloa, misma que se caracteriza por ser la principal zona pesquera de Baja California Sur; sin embargo se derivó en un conflicto con la empresa estadounidense Odyssey Marine Exploration y la Cooperativa de Producción Pesquera Puerto Chale.
Al respecto, según lo informado dentro de la página oficial de la Cámara de Diputados, los legisladores de Baja California Sur, Jisela Páes Martínez y Ernesto Ibarra votaron a favor de esta reforma; por su parte, Herminio Corral, del PAN, estuvo ausente al igual que la representante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Esthela Ponce Beltrán.
Dentro de lo contemplado en dicha reforma, no se considerarán vertimiento peligrosos o dañinos los que provengan de la explotación de los fondos marinos para ser devueltos al océano, es decir, “no se aplicará a la evacuación o el almacenamiento de desechos u otras materias que resulten directamente de la exploración, explotación y consiguiente tratamiento mar adentro de los recursos minerales del lecho o subsuelo marino”, lo que significa que los desechos que resulten de los trabajos mineros en el fondo del mar, podrán verterse de nuevo en el ecosistema marino.
“No se considerará como vertimiento la evacuación en el mar de desechos u otras materias resultantes, directa o indirectamente, de operaciones normales de buques, aeronaves, plataformas u otras construcciones en el mar y de su equipo, salvo los que se transporten en los destinados a la evacuación de esas materias, se transborden a ellos, o resulten del tratamiento de las mismas en esos buques, aeronaves, plataformas o construcciones”, establece el dictamen en el Artículo 3 Bis.
La página explica que no se considerará vertimiento el abandono de materiales que hayan sido colocados para un fin distinto de su mera evacuación, como cables, tuberías y dispositivos de investigación marina.
“No se aplican a la evacuación o el almacenamiento de desechos u otras materias que resulten directamente de la exploración, explotación y consiguiente tratamiento mar adentro de los recursos minerales del lecho o subsuelo marino, o que estén relacionadas con dichas actividades, excepto los restos que por sus dimensiones y características representen un impacto ambiental adverso al medio ambiente marino”, establece la reforma en el Artículo 3 Ter.
Con información de SDP Noticias
