En pandemia se resguardaron 304 niños de BCS por maltrato; 80 % volvió a su hogar: Procuraduría

Los padres de familia tienen un tiempo limitado para mejorar habilidades de crianza; de lo contrario, se busca a otras familias
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Los Cabos, Baja California Sur (BCS). En entrevista, la titular de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, Yesenia Ramírez Saldaña informó que han vuelto a casa al menos un 80 % de los niños que, durante la pandemia, sufrieron algún tipo de agresión y quedaron bajo el cuidado del organismo.

«Desde hace un año hemos registrado 304 reportes por algún tipo de maltrato u omisión de cuidado. Esto prácticamente en los últimos 8 meses que, del año pasado fueron de la pandemia, al menos el 80% ya están de regreso en sus casas», detalló la Procuradora, quien añadió que las edades de los pequeños que pasaron por esta situación oscilan entre los 6 y 12 años.

Por otro lado, Ramírez Saldaña explicó que la duración del procedimiento (desde que se levanta el reporte, hasta que se resguarda al infante) es de 2 a 3 meses como mínimo, pues lo primero es localizar a algún familiar que le proporcione al menor un entorno similar.

Posteriormente, si no se localiza a un familiar que cuente con las condiciones adecuadas para cuidar al pequeño o pequeña, entonces se lleva a los menores a una casa hogar. En este punto, describió que este es el tiempo con el que cuentan los padres para desarrollar habilidades que favorezcan una crianza positiva, y que permitan al menor incorporarse a una vida diferente, con el apoyo completo que una red familiar debe tener.

Del mismo modo, explicó que el otro 20 % de los 304 reportes aún están institucionalizados de forma temporal, mientras se siguen analizando otras alternativas. Así, en el caso de que en un periodo de 9 meses o un año, el asunto no llegara a resolverse, se procede con la búsqueda de opciones alternas de familias. Sin embargo, la titular comentó que hay una probabilidad del 5 % de que, por las edades, los niños y niñas no logren reintegrarse en otras familias. 

Finalmente, Ramírez Saldaña concluyó que «la pandemia nos puso en advertencia sobre la importancia de la integridad física y mental. Ahorita hay que estar atentos (de) qué va a pasar con los niños al regreso del ciclo escolar y el rezago educativo, porque también es una afectación durante la pandemia. Violenta sus derechos fundamentales». 


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