La Paz, Baja California Sur (BCS). La familia Coppola, dueña del hotel Los Arcos, se volvió a amparar, dio a conocer Alberto Rentería Santana, representante de los trabajadores huelguistas.
“Recibimos de parte del H. Tribunal colegiado del vigésimo sexto circuito, la notificación de un amparo directo donde solicitan la protección de la Justicia federal para efectos de desconocer la representación legal de un servidor como representante de los trabajadores huelguistas”, informó en un comunicado.
Rentería Santana dijo que desde su perspectiva, el amparo promovido es para retardar o evitar, el pago de 55 millones de pesos a favor de los trabajadores huelguistas por concepto de salarios caídos en seis años.
Además, indicó que “el argumento de la representación legal como ya bien se los hizo saber la Junta de Conciliación y Arbitraje, está fuera de toda lógica jurídica al no haberlo hecho valer en el momento procesal oportuno”, indicó.
Habrá que recordar que Fernando Martínez Gallegos, líder nacional del Sindicato de Trabajadores de la Industria Gastronómica de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), advirtió que Alberto Rentería Santana, quien funge como dirigente del Sindicato de Gastronómicos de BCS y cabeza de las huelgas en el Hotel Los Arcos, en La Paz, y Palmilla, en Los Cabos, no es cetemista, por lo que será demandado penalmente al utilizar los logotipos de la central sindical obrera.
Mientras tanto, a inicios de diciembre del año pasado, Mario Ignacio Coppola Joffroy, propietario del hotel Los Arcos, dio a conocer que había interpuesto una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR), y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en contra del Sindicato de Gastronómico de Baja California Sur y sus dirigentes, así como de las autoridades de la Junta Estatal de Conciliación y Arbitraje, por delito de fraude procesal.
El empresario aseguró que desde un inicio la autoridad estatal conocía que los trabajadores en huelga no eran 87, sino 19, pues en 2009, dijo, hubo liquidaciones en la deudas con los empleados; el resto, quienes continúan en la protesta, sostuvo, han sido engañados por Alberto Rentería Santana, líder del sindicado, asegurando además que los mismos “ya no tienen nada, están en la calle”.
El sindicato, la autoridad y propietarios deben de estararrepentidos por haber cerrado una empresa creada por sus padres, generadora de bienestar y emblematica para la ciudad.
El derecho laboral (derecho del trabajador) no debería cerrar una oportunidad para los mismos trabajadores, es contradictorio.
Lástima de hotel.Junto con el Perla fue emblemático de ésta ciudad