La Paz, Baja California Sur (BCS). Sólo 13 de los 136 comisionados sindicales que registra la Secretaría de Educación Pública (SEP) en BCS pertenecen al Comité Ejecutivo Seccional Democrático (CESD), dan a conocer los propios líderes de la organización laboral disidente, advirtiendo que no volverán a las aulas a menos que la base laboral lo decida así, o que todos los comisionados, incluyendo los del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), regresen también a impartir clases.
Y es que tan sólo sumando los años que cuatro de los más recordados líderes del SNTE en BCS llevan como comisionados –Manuel Fort Mayoral, Jorge Miguel Cota Katzenstein, Guillermo Aguilar Villavicencio y Alfredo Reyes Cervantes-, dejó ver el CESD, se llega a casi 120 años, mientras que la organización disidente no cuenta con más de cuatro años representada por los actuales líderes.
Héctor Jiménez Márquez, secretario de Educación Pública en la entidad, recientemente aseguró que este mes regresarían a las escuelas 83 comisionados sindicales, o sufrirían las consecuencias, ninguno de ellos del SNTE.
Es por esto que tanto Marco Antonio Olachea González, Federico Fernández Hernández y Francisco Javier Salgado Agúndez, dirigentes del CESD, dan a conocer que este mes de octubre culmina su periodo, en donde se realizará una asamblea para decidir “si lo que sigue es construir una forma de organización para la lucha sindical sin comisionados”, aunque si el pronunciamiento de los trabajadores es que las comisiones persistan, “cueste lo que cueste, cesados o en la condición que sea, lo vamos a hacer”, dicen.
“Por supuesto que sabemos de los riesgos, pero la determinación se tendrá que tomar según lo que nos digan los compañeros desde sus escuelas, lo que nos digan los compañeros desde las asambleas”.
Jiménez Márquez señaló cuando anunció el regreso obligado de los comisionados a sus centros de trabajo que los únicos 53 delegados reconocidos por la SEP es porque cuentan con una toma de nota, sin embargo esto no es verdad, según señalan los secretarios generales del CESD, recordando que en la asamblea para elegir un líder sindical del SNTE en 2008, el “grupo institucional”, al verse rebasado por el número de simpatizantes de los docentes democráticos, sesionó al margen del congreso oficial de elección para imponer a Aguilar Villavicencio, situación que cuatro años después, en 2012, tribunales federales dieron cuenta ofreciendo un laudo condenatorio al CESD donde se afectaron de nulidad los trabajos de dicha asamblea, así como todos los documentos firmados por Guillermo Aguilar, por lo que la sucesión de liderazgo a Mateo Casillas Ibarra, como la propia dirigencia de Guillermo Aguilar, son legalmente inválidas, a pesar de que el Gobierno del Estado no lo ha reconocido.
Cabe recordar que el grupo disidente convocó a un paro de labores total en todo el estado para este 10 de septiembre, al que ya se suman primarias y secundarias, principalmente en La Paz, emulando la huelga que existe en Los Cabos para exigir basificaciones y reconocimiento de los exámenes docentes aprobados para el otorgamiento de plazas, entre otras solicitudes derivadas de las afectaciones que ha tenido la reforma educativa en el gremio sudcaliforniano.
Y el inepto gobierno del Estado le echará la culpa a las «Reformas» …