La Paz, Baja California Sur (BCS). Las vacaciones de los más de mil 250 empleados sindicalizados del Ayuntamiento de La Paz se recorrerán hasta tres días debido al retraso en el pago de la prima vacacional, que asciende a más de cuatro millones 300 mil pesos, reveló Francisco Javier Osuna Frías, dirigente municipal del Sindicato de Burócratas.
El líder laboral explicó que aquellos trabajadores a los que se les pagó su salario el pasado miércoles 16 de julio, la mayoría de ellos de Servicios Públicos Municipales, tendrán una extensión de un día en sus vacaciones; los trabajadores del Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y Tránsito Municipal, que se espera reciban su participación este jueves 17 de julio, contarán con una extensión vacacional de dos días; mientras que “áreas menores” y de Oficialía Mayor, que se espera reciban la prima el viernes 18, contarán con tres días más de asueto.
Pero con estos pagos no acaba el problema, pues también se exige el pago de nómina, que es de más de seis millones de pesos, sin mencionar que para el día último del mes el sindicato espera el pago de tres millones 300 mil pesos más por concepto de “útiles escolares”, convocando a paro laboral “al siguiente día”.
Osuna Frías advierte que la situación se complicará bastante, pues la temporada de julio a octubre los ingresos propios del Ayuntamiento paceño disminuyen hasta en 50%, aunque el gasto corriente, que es de más de dos millones diarios, no se detiene.
“Desconozco por qué todavía hay candidatos que quieren ser presidentes municipales, si esta es una situación caótica”, señala, explicando que la única solución es la intervención del Congreso del Estado para que inicie un reordenamiento administrativo y financiero, así como obligue la creación de un organigrama y un manual de funciones, a fin de acabar con la creación de puestos innecesarios y los privilegios de regidores que cuentan hasta con 10 asistentes, dijo, ayudando así a que el 90% del presupuesto anual del municipio de La Paz se destine a pagos de nómina.
Javier Osuna recordó que tan sólo en el paso de los perredistas Víctor Castro Cosío, Víctor Guluarte Castro y Rosa Delia Cota Montaño por la alcaldía se sumaron aproximadamente 900 trabajadores de confianza, aunque no superaron al panista Adán Ruffo Velarde, que abultó la nómina con el ingreso de cerca de 500 personas entre 1993 y 1996. En este sentido, aseguró que durante la administración de Víctor Castro sólo se basificó a dos personas, mientras que Gualuarte basificó 20, llegando al número de sindicalizados que son hoy, contra casi cuatro mil que suman los empleados de confianza.
Finalmente, adelantó que este viernes 18 de julio cerca de mil 600 trabajadores del Sindicato de Burócratas en BCS se irán a paro en Mulegé y Comondú, donde su salario quincenal no ha sido cubierto y “no hay esperanzas de para cuándo”.