La Paz, Baja California Sur (BCS). El diputado priista Ramón Alvarado Higuera propuso ante el pleno del Congreso del Estado considerar la pelea de gallos Patrimonio Cultural Inmaterial de BCS, asegurando que esta actividad “reúne las diferentes expresiones y manifestaciones de la vida de los pueblos” sudcalifornianos.
“No podemos imaginar el futuro de nuestro estado sin la inspiración del pasado, ya que estas raíces culturales nos fortalecen y orientan para recrearnos como sociedad”, dijo el legislador, agregando que “una de las vías para ejercer el turismo” en la entidad “es mediante el Patrimonio Cultural Material e Inmaterial”, en este caso “el hermoso espectáculo” de la pela de gallos.
Recordando que se tienen registros de esta práctica desde hace 2,500 años alrededor del mundo, Alvarado Higuera dijo que según lo que ha leído “Hernán Cortés llegó a México con la espada en una mano y sus gallos en la otra”, agregando que “una de las primeras acciones que emprendió, ya establecido en México, fue construir su gallinero para criar gallos de pelea”.
“Esta actividad ha sido celebrada y realizada por grandes hombres, algunos de los más importantes y reconocidos gobernantes norteamericanos han sido aficionados a estas prácticas, como George Washington y Abraham Lincoln; otros, como Andrew Jackson, aún durante su estancia en la Casa Blanca continuó siendo criador, gallero y fungiendo como juez de arena”.
Así, el priista recordó que en la República Mexicana una de las autoridades encargadas de otorgar permiso para la celebración de las peleas de gallos es la Secretaría de Gobernación (Segob), a través de la Dirección General De Juegos y Sorteos, siendo en BCS la misma dependencia la que se encargaría de regular las peleas en caso de ser consideradas patrimonio inmaterial cultural de BCS.
El proyecto de decreto se turnó a las comisiones de Asuntos Educativos y de la Juventud, presidida por la diputada Guadalupe Olay Davis, y la comisión permanente de Arte y Cultura, a cargo de Sandra Luz Elizarrarás Cardozo.
Cabe recordar que Ramón Alvarado es el único diputado de la XIII Legislatura al que un grupo de ciudadanos, en este caso de Todos Santos, donde se encuentra el distrito que representa, le han pedido su renuncia, aunque éste hizo caso omiso de la solicitud popular.
su cerebro solo le da para eso, no lo juzguen.
Deberían mandarlo a la horca o quemarlo, mínimo, por ser del PRI. Ya no hace nada por el pueblo, ya no permite el progreso de la ciudad. Solo pierde el tiempo de un verdadero diputado que ayudará al pueblo.