La Paz, Baja California Sur (BCS). A mediados de agosto, los vendedores de adornos, trajes y banderas en alusión al mes patrio, llegan a la Capital del estado y se van el día 16 de septiembre. Lo que más se les venden son los vestidos para niñas y las banderas pequeñas, comentó Saúl Zamora Pérez, quien es originario de Toluca, Estado de México y tiene 5 años viniendo a La Paz.
“Tengo 5 años viniendo, somos varios, conmigo vienen 6 personas, pero andan más y venimos desde 16 de agosto hasta el 16 de septiembre […] Al principio está flojo, pero poco a poco se va nivelando.
“Lo que más se vende siempre son los trajes para los niños, más los vestidos para niñas, ese lo vendemos entre 120 y 280, el más caro. Los vestidos siempre se acaban, la gente a veces deja las cosas a lo último y anda buscándolos, pero para esas fechas ya no hay […] Si está muy bajo, 500 pesos; el mero 15, deben de ser unos 2,000 ó 2,500 pesos”.
Las banderas, uno de los emblemas más importantes de México, se vende poco en las piezas grandes, mencionó Saúl; mientras que las pequeñas, por su bajo costo, se venden más rápido.
“Las banderas grandes de repente la gente sí compra, a la que le gusta traer en sus carros o casas, esas están en 600 pesos; se venden más las pequeñas, que están en 15, 20 ó 30 pesos […] Los moños también se venden mucho, por lo genera si llevan el vestido, también se llevan los moños y otros adornos”.
El oriundo d e la capital mexiquense comentó que las ventas son casi todos los años la misma, la gente compra lo justo para el día y ya, por lo que es común que regrese a su lugar con mercancía. “Siempre es lo mismo, casi siempre es la misma venta, la gente compra lo que cree que es necesario y hasta ahí. Siempre sobra”, dijo. “Poco, eso ya no se vende mucho, creo que la gente ya no se emociona como antes de hacer ruido y eso, compran algunos para niños”, sobre las ventas de cornetas, trompetas, matracas y todos los artículos que hacen ruido.
Aunque para el vendedor la situación económica es difícil, él considera que ésta no tiene nada que ver con ser mexicano, por lo que la gente sigue comprando adornos para celebrar su independencia. Además, expresó que sí deja ganancia la venta de este tipo de artículo, si no, no hubiera regresado estos 5 años; incluso, a pesar de perder todo en el 2014 tras el huracán Odile, regresó el 2015 y ahora en el e 2016.
“La situación del país es mala, pero no tiene nada que ver con ser mexicano, la gente sigue festejando la Independencia […] Si llevo 5 años viniendo aquí, pues uno viene a ganar, y sí deja ganancia, si no, no hubiera regresado; ni con Odile me arrepentí, quebré, pues no vendí el 14 ni el 15, y sigo regresando a La Paz.
“Aquí el contrato es del 16 al 16, lo hacemos con Soriana que es quien nos da el espacio. Hay gente que vende en las calles, aunque a veces es aburrido, pero conviene mejor estar aquí fijo”, concluyó, hablando sobre el lugar que tienen asignado para vender sus productos que, en este caso, es en la plaza Soriana La Paz.
