La Paz, Baja California Sur (BCS). El director del Instituto Sudcaliforniano de Infraestructura Física y Educativa (Isife), Carlos Rivas Izaola, declaró que, volver a construir un edificio similar como el de la Escuela Primaria ’18 de Marzo’, puede costar cerca de los 30 millones de pesos, algo que resultaría muy difícil económicamente, debido a la poca matrícula que registraba el plantel educativo en la actualidad.
“Aún no tenemos un costeo de lo que costará un trabajo de demolición, sí hicimos un costeo de lo que puede significar una reconstrucción total de un plantel similar, que puede oscilar alrededor de los 30 millones de pesos […] De ninguna manera significa que ya esté haciendo yo una valoración de reconstruirlo, una construcción similar eso cuesta”.
Mientras que construir una sola aula, cuesta “alrededor de 700,000 mil pesos”, señaló el Director del Isife; además, destacó que, a pesar de que los daños son más visibles en el tercer piso, las afectaciones están en todo el edificio, tanto en la segunda y la planta baja, pues en su totalidad ya presenta una edad que rebasa la vida útil de un edificio.
“Las condiciones del tercer nivel son evidentes, tal vez pudiera haber una opinión en el sentido de que la planta baja se ve, aparentemente sana; sin embargo, es un edificio que en su totalidad tiene una edad que ya rebasa lo que alcanzaría útil un edificio […] Tiene la misma edad, aunque las afectaciones no sean evidentes, podría hablar de la posibilidad de una reestructuración o de un reforzamiento, sin embargo, por la edad del edificio, ya difícilmente sería económicamente conveniente”.
Sobre la fecha de demolición de la escuela, Rivas Izaola comentó que no hay ninguna definida por el momento, ya que todavía se están haciendo valoraciones de la estructura, principalmente en la planta baja.
“Los trabajos de demolición aún estamos en coordinación con la Secretaría de Educación Pública, que es la propietaria del inmueble, no tenemos fecha definida […] Ellos decidirán el uso que se le pueda dar, incluso, nosotros estamos haciendo todavía algunas valoraciones estructurales en lo que es la planta baja […] En el análisis de los procedimientos que tendríamos que seguir, obviamente, guardando todas las medidas de seguridad”.
En ese sentido, el titular del Isife, destacó que también se están realizando estudios más profundos, que tienen que ver con la resistencia que el concreto y el acero podrían tener todavía; pero, a pesar de eso, insistió que, por la edad que presenta el inmueble, es muy probable que salga “más caro pensar en alguna conservación o rehabilitación”.
“Estamos haciendo unas precisiones en la planta baja, ya yéndonos a estudios más a fondo, de obtención de núcleos de concreto para saber la resistencia que aún pueda tener, algún espectro del acero de refuerzo, tratando de tener un panorama mucho más claro, más profundo de las condiciones que pueda tener la planta baja, si algo se pudiera rescatar; insisto, ya por la antigüedad del plantel, muy probablemente salga más caro pensar en alguna conservación o rehabilitación”.
Finalmente, Rivas Izaola dijo que los dictámenes que presentaron los especialistas determinaron que había altos riesgos, y la última decisión la tomó el dueño del edificio, que es la SEP.
“En un principio, el dictamen técnico que elaboraron los especialistas en el Instituto, pues determina grados de riesgo altos, en este caso, en el tercer nivel, muy evidentes, y la decisión la toma el dueño del inmueble, que es la Secretaría de Educación Pública”.
