La Paz, Baja California Sur (BCS). Aunque su expectativa de crecimiento del 5% para 2014 se vio mermada por la homologación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) al 16% y el impacto del huracán Odile, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) en BCS espera cerrar el año con el mismo número de ventas que en 2013, 4,750 unidades, un hecho que Roberto Violante Zubieta, su presidente, atribuye a la derogación del impuesto de tenencia vehicular, medida que espera eleve en 2015 el número de autos vendidos en seis puntos porcentuales.
Hasta el 19 de diciembre, la AMDA en BCS registra la venta de 4,148 unidades, tres menos que en el mismo periodo de 2013, esperando que diciembre culmine con poco más de 600 ventas, siendo Aveo y Trax, de Chevrolet; Versa, de Nissan; y CR-V de Honda, los vehículos más vendidos en el año.
Eduardo de la Mora Peña, gerente general de Volkswagen La Paz, asegura que tras la derogación del impuesto vehicular se percibió “una reacción muy positiva por parte del consumidor”, pues “de alguna manera se compensa el impacto del IVA”, luego de que “en septiembre se vendió la mitad de lo que comúnmente se vende y en octubre una cuarta parte”.
Este año, para compensar las caídas, explicó De la Mora Peña, Volkswagen colocó el 50% de sus ventas en el interior de la república, la mayoría flotillas, pues las ventas al menudeo sufrieron un decrecimiento de alrededor de 15%.
Por otro lado, el también ex presidente estatal de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) se refirió a los impactos negativos que la reforma laboral y fiscal han tenido sobre el sector empresarial sudcaliforniano, asegurando que gracias a este binomio la reforma financiera, que pareciera contar con bondades, no tendrá efectos positivos.
“Por más que el Banco de México baje sus tasas de interés, ese beneficio no se le va a trasladar a los usuarios de créditos, porque las instituciones bancarias están impedidas por las reformas fiscal y laboral […] La reforma fiscal está lejos de estar operando del sector productivo, es una reforma que ya se demostró que no está funcionando […] También la laboral es una reforma totalmente estéril, una reforma que lejos de haber generado empleo está teniendo contrario […] Mucho tiene que ver con funcionarios que hacen que la ley no se cumpla, habla de favoritismos, hablo de intereses y hablo de todo tipo de maniobras de las que la autoridad muchas veces se vale para poner de su lado la ley y no del lado de quienes generan los empleos […] Deja mucho que desear la gestión del ejecutivo y del senado y los diputados federales”.
