La Paz, Baja California Sur (BCS). Alrededor de una media hora antes del inicio de la toma de protesta del gobernador Carlos Mendoza Davis, se registró un conato de bronca entre manifestantes y el equipo de seguridad que resguardaba la entrada a la Plaza de la Refoma, ubicada frente al Palacio de Gobierno, por no permitirles el paso con sus pancartas.
Entre los inconformes estaba Daniel Hernández y su esposa, padres del joven Jonathan Hernández Ascencio, quien fue asesinado el 4 de marzo del 2010, para exigir al nuevo gobernador se haga justicia, por el homicidio de su hijo, que ha quedado impune por la corrupción de los mandatarios salientes, denunció.
Al grito de consignas también se unieron enfermeras de la Secretaría de Salud, quienes protestaron por supuesta designación de plazas poco transparentes que se llevó a cabo, en beneficio de familiares de varios funcionarios de primer nivel, como el ahora exsecretario Virgilio Jiménez Patiño.
Además, en el lugar se apostaron civiles que se manifestaron en contra de la mina Los Cardones, para pedir al nuevo Gobernador de BCS, se niegue la autorización del proyecto, que planea instalarse en la zona de amortiguamiento de la Sierra de la Laguna.
Los maestros, integrantes del Comité Ejecutivo Nacional Democrático del SNTE, quienes se encontraban atrás de unas vallas de seguridad, cuestionaron con pancartas la ratificación de Héctor Jiménez Márquez como secretario de Educación Pública.
MERITOS, QUE CHINGAO – JAJA – se ha creado una élite política sin clase