La Paz, Baja California Sur (BCS). El consumo de metanfetamina es el principal causante de que personas se internen en centros para atención a adictos en Baja California Sur, ya que genera daños neurológicos inmediatos que hacen imposible una atención ambulatoria, según los servicios de salud del estado.
«Tanto Sonora como Baja California Sur sufrimos de esta droga de impacto» que ha llenado los 26 centros de internamiento para adictos», dijo María Estela Castro Terrazas, directora del Centro Estatal de Salud Mental y Adicciones (CESMA).
«En la desesperación de la gente enferma, suele inclusive hacer la droga en cualquier taller solo con conocer cuales son los ingredientes», dijo Castro Terrazas, en entrevista con BCS Noticias.
«Es la droga más peligrosa que ha existido por los químicos que tiene y por cómo va al cerebro; es la más peligrosa por cómo se usa, la droga se inhala y va a dar al cerebro», dijo la maestra en psicología.
Según la directora del CESMA, no es lo mismo rehabilitar a un usuario de marihuana o cocaína que a uno de metanfetamina, ya que esta droga «rápidamente va a producir un daño orgánico severo» que lleva a los pacientes a daños neurológicos a veces permanentes.
El usuario debe saber que obligatoriamente «tendrá que hacer uso de medicamentos a la par con la deshabituación» para poder sobrellevar su adicción.
La mayoría de los 1,200 pacientes internados en centros residenciales fueron adictos a esta droga y corren un riesgo crítico de convertirse en pacientes psiquiátricos, «el consumo de calmantes se ha incrementado muchísimo en pacientes que tienen este tipo de adicción», sostuvo.
El CESMA trabaja con 14 de los 26 centros residenciales instalados en el estado, mismos que atienden a pacientes en situación grave. En tanto, otros pacientes son atendidos en las seis unidades médicas para atención primaria ubicadas desde Guerrero Negro hasta Cabo San Lucas.
Sin embargo, en todas prolifera la atención de pacientes con adicción a dicha «droga de alto impacto», agregó Castro Terrazas.
