La Paz, Baja California Sur (BCS).- Luego de que el presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje de BCS, Mohamed Medina de la Toba, fuera acusado de favorecer a la familia Coppola Joffroy al “rasurar” 23 millones de pesos de la cantidad total de dinero que se les debe a los 80 trabajadores huelguistas del hotel Los Arcos, el Juzgado de Distrito otorga amparo al Sindicato de Gastronómicos de BCS por 50 millones de pesos.
Esta última sentencia emitida por el Juzgado de Distrito concede amparo a ambas partes en realidad. En lo que respecta al sindicato, se les otorgaron ocho de las 14 prestaciones que exigían y que Medina de la Toba había reducido a tres, lo que Alberto Rentería Santana, secretario general del Sindicato de Gastronómicos, consideró siempre “un robo” de parte del presidente de la Junta de Conciliación.
La resolución de Mohamed Medina sólo consideraba sumar a la deuda de Los Arcos y Mario Coppola Joffroy el salario diario de los trabajadores, así como el aguinaldo y la prima vacacional; mientras que los huelguistas exigían agregar propinas y 10 prestaciones más, entre ellas canasta básica, tres por ciento de cuota sindical, utilidades, fondo de ahorro, premios de puntualidad y asistencia y bono de útiles escolares. El juez de distrito les otorgó ocho, que son: salario, canasta, fondo de ahorro, premios de asistencia y puntualidad, prima vacacional, aguinaldo y propinas, lo que suma 50 millones 500 mil pesos.
Por otra parte, a la empresa se le concedió que la Junta de Conciliación desahogue en su totalidad las probanzas que se han interpuesto ante el tribunal, entre ellas que se solicite al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la alta de los trabajadores huelguistas, para conocer “si son eventuales o si son de planta, para efecto de establecer su sueldo diario y el integrado”.
Rentería Santana, finalmente, no descartó que Mario Coppola y sus abogados soliciten la revisión de la resolución del Juzgado de Distrito, “como sistemáticamente lo han hecho con cada amparo que gana el sindicato”, por lo que visualiza un panorama donde finalmente se llegue al embargo del lugar, aunque se ha devaluado sobremanera luego de cinco años de huelga, dijo, pues las instalaciones se encuentran “deterioradas, decaídas y apolilladas”.
