La Paz, Baja California Sur (BCS). En las primeras horas de este lunes 8 de enero, un grupo de trabajadores de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Baja California Sur tomaron las instalaciones, impidiendo el paso la presidenta, Charlene Ramos; entre las exigencias que se presentan está la destitución de la actual titular del organismo.
Dentro de los argumentos presentados por los quejosos se menciona que existe un trato cruel y degradante, amenazas e intimidación, violencia de género, acoso laboral y abuso de poder, según expusieron en carteles y ante medios de comunicación.
Para el cierre de la oficina se colocaron cadenas en la puerta principal, además de colgarse las banderas de huelga en diversos puntos de las instalaciones, entre ellas la puerta principal y en diversas áreas del edificio.
“Lo que estamos manifestando en nuestro paro laboral, como trabajadores hemos estado siendo hostigados; hay 10 compañeros, en un periodo de 7 meses que tiene la Presidenta, que han sido despedidos injustificadamente, otros forzados a renuncias por hostigamiento; ya hay demandas laborales, la Comisión Estatal de Derechos Humanos está enfrentando demandas laborales”, expresaron.
En el lugar se hizo presente la Comisionada de Derechos Humanos, quien aseguró que no es un paro laboral, señalando que se trataba de un “ilícito”, por lo que se procedería de forma legal y se tendrían las consecuencias correspondientes.
“Bueno, no es un paro laboral, no es un procedimiento legal […] lamentablemente sabemos es ilegal y va a tener sus consecuencias correspondientes. Por su puesto, las personas están realizando actos ilícitos, son delitos, están impidiendo el acceso a una institución de gobierno para poder realizar procedimientos legales […] este actuar por supuesto es ilegal”, comentó.
