La Paz, Baja California Sur (BCS). El Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) en Baja California Sur, creado en el 2017, fue sometido a evaluación por parte de una Iniciativa de Transparencia y Anticorrupción del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en donde se le asignó al organismo una calificación de 2 puntos de 12 contemplados, señalando de “deficiente” su trabajo.
A la fecha, se encuentra entre los 5 peor calificados, compartiendo la puntuación con Ciudad de México, Nayarit, Oaxaca; y solo por encima de Chiapas, quien tiene la puntuación de 1 en la evaluación.
Los criterios a evaluar fueron si la fiscalía cuenta con un presupuesto, el número de funcionarios y el nivel de estudios mínimos; los vínculos con la Fiscalía General; la existencia de una rendición de cuentas; asignación de casos y mecanismos disciplinarios.
Es decir, no se sabe cuál es el presupuesto de dicho órgano, ni el número de denuncias y acciones realizadas desde que se creó hasta la actualidad. Tampoco se rinde cuentas sobre las sentencias relacionadas con el combate a la corrupción.
El sistema tiene como objetivo “coordinar a las autoridades locales competentes en la prevención, detección y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción de todo servidor público, así como en la fiscalización y control de recursos públicos, siguiendo los lineamientos establecidos en el Sistema Nacional Anticorrupción”, menciona la Ley de Responsabilidades Administrativas del Estados y Municipios de Baja California Sur. Sin embargo, su eficacia ha sido nula de acuerdo a las evaluaciones.