La Paz, Baja California Sur (BCS). El presidente de la Asociación de Cruceros en la entidad, José Arturo Musi, comentó a BCS Noticias sobre la posibilidad de que para 2022 comience la reactivación de cruceros en la entidad, además de resaltar que esta actividad será provechosa para la economía de la capital de Baja California Sur, pues cada vacacionista deja una derrama económica de 120 dólares. Además, agregó que la mayoría de las embarcaciones proviene de Estados Unidos.
“Ahorita en el mundo están parados los cruceros. Ahorita no hay la actividad por lo de la pandemia (sic). Empiezan a reactivarse en Europa, en el Caribe el año que entra. Creemos que la reactivación (será) hasta el año que entra, cada barco, más o menos el promedio de derrama es de 90 o 120 dólares por pasajero, más aparte (sic), el tripulante”, expresó.
En este sentido, señaló que un año antes de que arribara la pandemia al estado, La Paz recibió 15 cruceros; cantidad de la que comentó que, pese a no ser mayúscula, deja una buena ganancia tras los gastos de los turistas y la tripulación. Esto, ante la controversia que se ha formado entre asociaciones defensoras de la fauna marina, las cuales han argumentado recientemente que los cruceros dañan al Tiburón Ballena.
“Cuando más recibimos eran 15. La mayoría venían de San Diego, de Estados Unidos, o eran los que estaban posicionados, que cruzaban el canal de Panamá y venían a hacer su ruta para Alaska. Es una cifra muy chica que creemos que se aumentará con mejores instalaciones en un poco más. Pero nunca el flujo de cruceros que hay en esta área —la Riviera Mexicana— no llega a tantos como para el destino poder tener más de 150. Tenemos que quitarle los arribos a Cabo San Lucas o a Mazatlán; a Vallarta, que lo dudo, porque son destinos más maduros; con mucha infraestructura turística para los cruceros”, enfatizó.
Por otro lado, el presidente afirmó que la temporada baja para la llegada de cruceros en La Paz es el verano, debido al calor que hace en la Bahía; además de los viajeros prefieren destinos como Argentina, mientras que el invierno es cuando más cruceros eligen la capital sudcaliforniana como destino.
“La temporada alta generalmente es invierno, que es cuando Alaska no funciona. Entonces están haciendo sus rutas, buscan otras rutas que es la temporada de Alaska (sic). La temporada baja es el verano, que ahí es donde, pues, por el calor que hace y que, además de que hay otros destinos en Argentina y Chile, baja la ocupación”, indicó.
Finalmente, concluyó que, para el próximo año, La Paz podría tener un crucero por semana, una vez que comience la temporada fuerte. Esto, luego de que las embarcaciones estuvieron paralizados por la pandemia del COVID-19 y, con ello, haberse sufrido una crisis económica en este rubro.
