La Paz, Baja California Sur (BCS). El Gobierno del Estado no define su postura en la pugna por considerar Reserva de la Biosfera las sierras La Giganta y Guadalupe, sin embargo, el mandatario de la media península, Marcos Covarrubias Villaseñor, ha pedido que la decisión no sea tomada de forma unilateral por la federación, sino que se escuche al pueblo de BCS y, en particular, a los lugareños.
“Nosotros queremos que los sudcalifornianos participen, no queremos que por decisión unilateral se realicen este tipo de situaciones, que no sabemos de qué manera la vean quienes son los habitantes de Baja California Sur”, dijo el gobernador.
Sobre el decreto, que es impulsado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y apoyado por asociaciones como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y la Sociedad de Historia Natural Nirarajá, existen expresiones en contra de un buen número de ejidatarios de aquellas latitudes, en el municipio de Loreto, apoyadas por la Confederación Nacional Campesina (CNC), de extracción priista, dirigida en BCS por el diputado Ramón Alvarado Higuera.
Sobre esto, Juan Alberto Valdivia Alvarado, presidente estatal del PRI, ha dicho que aunque la propuesta de decretar Reserva de la Biosfera las sierras La Giganta y Guadalupe proviene de las oficinas del presidente Enrique Peña Nieto, no existe un desacato a las leyes internas del tricolor.
Así, Covarrubias Villaseñor se ha situado al margen del conflicto, que será sometido a consulta pública por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y que hasta el momento ha desatado furor mediático.
“Nosotros hemos sido muy enfáticos”, insistió el gobernador, “en que queremos que se tomen en cuenta las opiniones de los sudcalifornianos”, las cuales, hasta el momento, han dejado ver que la creación de una nueva reserva no es del agrado.
