La Paz, Baja California Sur (BCS). Los únicos baños públicos de La Paz fueron construidos en 1988, se encuentran en la zona centro, sobre la calle Santos Degollado, entre Revolución de 1910 y Aquiles Serdán, se trata de Baños Señorial, que ofrecen servicio de regaderas y sanitarios los 365 días del año, de siete de la mañana a ocho y media de la noche.
El primer propietario fue el señor Salvador Gutiérrez Peña, quien en aquellos días, antes de la creación de Baños Señorial, contaba con una tortillería en el Mercado Francisco I. Madero; hoy en día el negocio es de su hijo, Luis Raymundo Gutiérrez Ross.
“Lo que pasa es que mi papá tenía una tortillera aquí adentro del mercado, que es el mercado Madero, y a él lo reubicaron afuera, donde está ahorita la tortillería, y en aquellos años había dos baños ahí, entonces mi papá le dijo, sabes qué, si quieres que yo me salga de aquí de adentro del mercado, dame la concesión de los baños, y así fue cuando mi papá empezó, le dieron la concesión de esos baños y él construyó aquí”.
Baños Señorial ha visto de todo, desde “gente mayor que no alcanza a llegar al baño”, hasta “gente que se droga”, “gente que se ha peleado adentro” y “borrachitos que llegan y hacen su desmadre”.
“Hemos encontrado celulares, bolsas, lentes, carteras, de todo…, una vez, fíjate, ahorita que estás tocando el tema, una vez llegó un señor bien ahogado y se limpió con cuatro billetes de a cien pesos, y yo los agarré y los lavé, los agarré con un guante y los tallé y ya, dije ‘véngase pa’ ca’, ahorita que tocaste el tema me acordé”, recuerda Luis Raymundo.
Las regaderas se activan principalmente en temporada de carnaval, mientras no es así mantienen baja actividad, sin embargo los sanitarios y mingitorios ven ir y venir a cerca de 400 personas al día.
Baños Señorial cuenta con seis regaderas y ocho sanitarios, la mitad son para hombres y la otra mitad para mujeres. El servicio de regadera ofrece agua caliente, jabón, estropajo, champú y toalla, por 30 pesos; el de sanitarios incluye papel higiénico y tiene un costo de cinco pesos.