La Paz, Baja California Sur (BCS). El nadador sudcaliforniano, Luis Armando Andrade Guillén, platicó cómo ha sido su carrera en el deporte paralímpico, y cómo ha tomado el hecho de que un accidente, a los 6 años, cambió su vida, colocándolo en uno de los deportistas con mayores éxitos y reconocimientos en el estado apenas a sus 20 años, con 131 medallas en su haber; además de reconocer a su familia como parte importante de ese proceso.
«Yo inicié por un accidente que tuve a los 6 años, con toda mi familia; era un camión, como esos de pesera, que venía rumbo a La Paz desde San José del Cabo, por vía larga, y pues el camión se volcó; estuve 1 mes en terapia intensiva, gracias a Dios no les pasó nada a mi familia, yo fui el único que sufrió en el momento.
«No fue muy difícil, porque, como te comento, yo solamente tenía 6 años, ni siquiera tenía una vida planeada, era un niño; lo que me ayudó mucho fue que mi familia siempre estuvo conmigo, es algo que ellos vivieron conmigo y pudimos superar juntos […] Con mi hermano Alberto me llevo muy bien, con él nací, y hacemos prácticamente todo juntos; ahorita me acabo de mudar solo, soy totalmente independiente, se aprenden muchas cosas», narró Luis Armando.
El atleta sudcaliforniano contó brevemente los éxitos más importantes que ha tenido a lo largo de su vida deportiva, donde, en 9 años, ha ganado 83 medallas en competiciones nacionales y 48 en internacionales; además de los reconocimientos que ha recibido por su trayectoria.
«Yo empecé en eso de los deportes como a los 11 años, fue mi primera vez un una Paralimpiada Nacional en el 2007, en Puebla, en 3 pruebas individuales que fueron medallas de oro; en 2009 fue mi primera competencia internacional, que fueron los Juegos Juveniles Parapanamericanos de Colombia, ganando 5 de oro y una de bronce; a los 16 años estuve en Londres, en los Paralímpicos, quedando entre los mejores 12; ahorita tengo 20 años, y éste ha sido el mejor año en mi carrera deportiva, gané el Premio al Mérito Deportivo, en el Congreso del Estado y el Premio Estatal de Deporte; y ese ha sido más o menos el resumen de mi carrera».
«Cuando estaba mas chico, a veces iba mi mamá o mi papá, pero ya más grande voy solo a las competencias, desde hace 3 años […] La prueba fuerte, donde fui medallista en el mundial, fueron los 100 mariposa […] Los entrenamientos dependen mucho de las carreras, del kilometraje, los descansos, saber hacer mis comidas, el gimnasio; en natación, los trabajos son muy específicos, sobre todo el estiramiento y la nadada, que de eso se encarga mi entrenador; y trabajo mucho en la técnica, lo cual ayuda a mejorar la velocidad», comentó Andrade Guillén.
El nadador expresó que en este momento no está realizando ningún estudio académico, pues se está preparando y concentrando en los próximos Juegos Paralímpicos que se realizarán en Río de Janeiro, Brasil, en el mes de septiembre del 2016, aunque dijo, que tiene ofertas de algunas universidades en diferentes partes del país, quienes le ofrecen casi en su totalidad, una beca deportiva.
«Ahorita no estoy estudiando, estoy 100 % concentrado en mis segundos Juegos Paraolímpicos, en Río, estoy dedicando mi tiempo ello […] Tengo ofrecimientos de becas en la Ciudad de México, en Monterrey y en Guadalajara, en universidades que me ofrecen el 90 % de beca deportiva; sí me gustaría estudiar algo, pero ahorita no estoy muy convencido de lo que quiero, mi objetivo ahora es buscar una medalla en los Juegos».
Finalmente, y otra parte de la vida de Luis Armando, son los tatuajes en su brazo, los cuales representan elementos como la fuerza, y que tienen un significado importante para él.
«Comencé a tatuarme a los 15 años, con una frase en la espalda que dice Lo que hagas en la vida, hace eco en la eternidad, de la película Gladiador, y desde ahí empezaron otros; la mayoría de son animales que representan la fuerza, como el el águila, un tigre, un tiburón, tengo una golondrina, 2 rosas, un faro, un barco, 2 palomas, unos aros de Juegos Olímpicos; mis papás siempre me han entendido mucho, el cuerpo es de uno, y mientras uno se sienta a gusto, está bien».
