La Paz, Baja California Sur (BCS). Luego de varias revisiones e interposición de quejas, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) determina que el Centro de Recuperación y Rehabilitación para Enfermos de Alcoholismo y Drogadicción (CRREAD) es el que “más problemas ha ocasionado” en Baja California Sur, entre los autodenominados centros de rehabilitación, presentándose incluso homicidios dentro de sus instalaciones.
Silvestre de la Toba Camacho, presidente en la media península de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, señaló que el viernes 23 de octubre mantuvo reunión con autoridades de la Secretaría de Salud (SSA) para buscar una regulación real de estos centros, los cuales, dijo, no pueden catalogarse como “de rehabilitación”, al dejar ver que uno de los peores CRREAD del estado es el ubicado en Guerrero Negro, municipio de Mulegé, detallando que en este momento “no está operando”.
“Sí tenemos varias quejas, y algunas que hemos estado aperturando nosotros por oficio. Nosotros hemos dado vista a las instancias correspondientes, en este caso a la Procuraduría del Estado, para que ellos hagan lo conducente en materia jurídica”, aseguró De la Toba Camacho, recordando que en este CRREAD “ha habido algunas personas que han perdido la vida” y que la CEDH gestionó el regreso a Tijuana, Mexicali y ciudades de Sonora a internos que se encontraban dentro durante el último homicidio registrado en el lugar, ocurrido este mes.
“Le estamos pidiendo al Procurador que agilice los asuntos, porque obviamente hay responsables”, mostró, agregando que los dueños de estos sitios “desde luego llevan su participación y su grado de responsabilidad también”, por lo que también se busca castigo para ellos.
“Estos centros no son centros de rehabilitación realmente”, anotó finalmente el Ombudsman sudcaliforniano, “podemos calificarlos como centros de ayuda mutua”, dijo, haciendo notar que en esta materia “no hay leyes ni marcos jurídicos específicos”, por lo que es tarea del Congreso del Estado actuar en consecuencia.
