Los Cabos, Baja California Sur (BCS). Luego de trascender que los legisladores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) subirán una iniciativa para prohibir la venta de alimentos chatarra a menores de edad, tras haber sido aprobada en Oaxaca, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en Baja California Sur, Héctor Jiménez señaló que es un hábito que se debe cambiar, pero de nada servirá la iniciativa si los padres de familia continúan llevándole comida basura a los hijos, por lo que será necesario crear, a la par, sanciones.
“Desde hace varios años se está tratando de hacer la intervención con muchas dificultades, pues hay que recordar cuando el sistema educativo intervino en las tienditas escolares, en donde se prohibió la venta de alimentos chatarra, la mayoría siguieron la instrucción de manera responsable, pero lo que encontramos es que los padres de familia les llevaban las sabritas, el gansito o la cocacola por el cerco, por lo que se deberán de crear sanciones para aquellos que lleven alimentos chatarra a los hijos dentro de las escuelas”.
Reiteró, que es fundamental cambiar la cultura en cuanto a los hábitos alimenticios, misma lucha que señaló, ha venido sosteniendo el ámbito educativo desde hace ya varios años; además, indicó que en estos tiempos de Covid es importante prevenir enfermedades: «De manera inmediata debemos contrarrestar el tema del coronavirus, ya que las principales morbilidades como diabetes e hipertensión, son producto de una mala alimentación y es importante empezar a trabajar desde las escuelas de nueva cuenta hacer todo el esfuerzo, pero de nada sirve si la mamá le va a llevar alimento chatarra».
Finalizó indicando el Secretario Estatal de Educación Pública, que sin duda alguna, la iniciativa es una lucha constante por los ingresos que viene a representar a los tiendas escolares: «Concesionar una cooperativa desde luego involucra que haya ganancias, y de repente esta es la única fuente de ingresos para las escuelas y con la limitante que se ha dado del no pago de cuotas, una de las alternativas de las escuelas será que a través de estas cooperativas escolares pudieran tener recursos para comprar plumones para los profesores, para comprar hojas o la tinta para las impresoras».
