La Paz, Baja California Sur (BCS). En Guerrero Negro ha ocurrido el envenenamiento masivo de perros, la mayoría callejero; el jueves se han localizado alrededor de ocho canes con visibles señas de intoxicación.
Carmen Grado, empresaria del ramo de la construcción, publicó en Facebook la trágica escena a manera de protesta porque su perra Chuchima la tarde ayer fue encontrada muerta; esta vez, pereció ante un potente químico que la paralizó hasta morir.
Chuchima ya había sudo envenenada con antelación, pero sobrevivió. Y antes, un pastor alemán que cuidaba los almacenes de su empresa falleció de la misma manera.
“Creíamos que le echaron veneno para meterse a robar, porque van varias veces que tiran veneno”, dijo en exclusiva a BCS Noticias. Sin embargo, al aparecer cada vez hay más perros asesinados, la situación se convirtió en algo fuera de lo común.
“Mi perro aquí vivía, pero el perro de los niños de atrás también se le murió, y pues la neta sí hay mucho perro por el lado del tubo”, expresó. Y en esa área continúan encontrando más. Asimismo, una paloma y una gaviota quedaron fulminadas por el veneno.
El suceso ocurrió en División del Norte y Nayarit, pero parece se extendió. La muerte coincide con la aparición de restos de carne cruda en diferentes puntos de la población.
El acelerado crecimiento del número de perros callejeros, en el pasado, fue señalado por personas de la pequeña ciudad de Guerrero Negro.
En 11 de diciembre de 2014, ciudadanos cuestionaron el maltrato de un Chihuahua que presentaba una laceración en el costado. La fundación Huellitas de Guerrero Negro A.C., y el médico veterinario Joaquín Villaseñor intervinieron para salvar a la perrita.
Entre los casos más sonados en los últimos años de maltrato animal, se encuentra Dingo y una cachorra criolla llamada Chiquis, ambos brutalmente golpeados, en La Paz, provocando serias lesiones; la perra perdió la vista a causa de una conmoción cerebral.
Uno de los problemas que las autoridades han señalado de los perros en la calle, se debe a la irresponsabilidad de los dueños, así como la falta de campañas de concientización.
quién o quiénes lo han hecho llegarán a sentir en carne propia los estragos de sus criminales acciones. Al tiempo.