La Paz, Baja California Sur (BCS). Una joven denunció que se realizó una perforación en la oreja derecha, en un establecimiento de pircing y joyería, ubicado en Cabo San Lucas y desarrolló una infección, por lo que fue sometida a una cirugía; el comercio no se hizo responsable del hecho.
“Tuvieron que hacerme una cirugía, porque ya el absceso estaba obstruyendo el flujo sanguíneo (…) ahorita, ya estoy en recuperación y tratamiento», comentó la afectada.
Cuando trató de contactar, nuevamente, con la persona que la atendió en el local, no tuvo respuesta. Una amiga de la joven fue hasta el lugar y se hizo pasar por otra clienta para poder conversar con el responsable, pero la dejaron esperando en la calle, con la excusa de tener otro cliente adentro.
De igual manera, la denunciante indicó que no es el dinero gastado en médicos lo que genera molestia, sino la actitud de la persona responsable de realizar el procedimiento, quien no asumió ningún tipo de responsabilidad ni contestó a sus llamados.
“Por eso siempre asegúrese que el perforador o tatuador cuente con tarjeta de sanidad ante Cofepris. Aquí en Los Cabos lamentablemente prefieren pagar barato que un buen trabajo, por eso siempre acudan a lo profesional, lo barato sale caro», mencionaron en los comentarios.
Con información de Las Noticias del Cabo
